Bajo el lema genérico de «Motivos para creer», el PSOE se presenta en las próximas elecciones generales con trece eslóganes y otras tantas fotografías del presidente Zapatero en actos de partido, mítines o reuniones de la dirección del partido. Los trece «Motivos para creer» en Zapatero son, cuanto menos, curiosos: «Por todo lo que merece la pena», «Comprometidos con la Igualdad»,«Vivimos juntos, decidimos juntos», «Porque lo estamos consiguiendo», «No es lo mismo», «Somos más», «La octava potencia económica, la primera en derechos sociales», «Ahora que avanzamos, por qué retroceder», «Podemos llegar tan lejos como queramos», «Soñar con los pies en la tierra», «Por todo lo logrado», «Porque no está todo hecho», y «Por el pleno empleo»... ¿perdón? ¡Vaya ojo clínico el del presidente y sus asesores! porque ¿no les parece desafortunado dar a conocer este último lema el mismo día en que se conoce el dato del paro de enero, que resultó ser la mayor subida mensual de los últimos 24 años?
Coincidirán conmigo que el eslogan «Por el pleno empleo» no les hará ganarse precisamente los votos de esas 132.378 personas que acaban de pasar a engordar las listas de desempleados en este país... Esta cifra supone que cada día de enero, 4.400 personas se quedaron sin empleo. ¿A alguien le extraña que la confianza de los consumidores españoles cayera en enero, por noveno mes consecutivo, debido, sobre todo, a la negativa percepción que tienen sobre la situación económica actual, en general, y las expectativas de empleo, en concreto? Tras reconocer que era un dato muy negativo, el titular de Trabajo quiso enmendar la mayor y puntualizó después sus palabras argumentando, una vez más, que es un problema estructural, que no empaña el excepcional comportamiento del empleo en la legislatura. ¡Y a mí qué si «cualquier tiempo pasado fue mejor» si a enero de 2008 los desempleados en España son ya 2.261.925! «El Gobierno está aquí para asumir su responsabilidad, no nos vamos de vacaciones», sentenció Caldera. Vale, pues que se vayan el 9 de marzo. ¿Otro lema era «Soñar con los pies en la tierra», no? Pues eso.
María Jesús Pérez
www.abc.es
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