Estudiantes protestan contra Chávez el pasado 25 de enero.Una vez más las calles de Caracas se vistieron hoy de colores variopintos: unos para protestar y otros para celebrar el 18 aniversario de la intentona golpista que dirigió el presidente Hugo Chávez, quien glorifica la efeméride sin mencionar las decenas de muertes que costaron su fallida aventura.
La Alcaldía de Caracas, que dirige el chavista Jorge Rodríguez, prohibió a los estudiantes marchar hasta el Parlamento para consignar un documento en el que piden una Asamblea Nacional imparcial, cuya sede fue rodeada con fuertes medidas de seguridad para impedir el paso de los manifestantes opositores.
Disfrazados de payasos
Sin embargo, los estudiantes, que habían hecho la convocatoria este miércoles disfrazándose de payasos con “las narices rojas” para satirizar a los diputados chavistas, se concentraron en la Plaza Brión de Chacaíto, donde fueron acompañados por los partidos políticos y la sociedad civil.
Días antes el presidente Chávez había amenazado a los estudiantes con aplicarles el rigor de la ley si osaban manifestarse sin el permiso previo, reconociendo de paso el uso de la “garra de hierro” de los policías para “tirar de los neumáticos quemados” y no para “reprimir”.
Esa misma “garra de hierro” con púas, denominada “garropiño”, que publicó el diario El Nacional la semana pasada, ha merecido por parte del gobierno una investigación en la Fiscalía por presunta “difamación” contra la Fuerza Armada Nacional.
Los estudiantes están protestando contra la dominación chavista en el Parlamento, la falta de libertad de expresión, el cierre de medios de comunicación y empresas, la falta de servicios como el agua, la luz, la penetración de los cubanos en la vida nacional y la celebración de la intentona golpista del mandatario, según muestran sus diversas consignas, cuyo leit motiv es el “fracaso de sus once años de gestión”.
Los seguidores del mandatario, acarreados en decenas de autobuses, marcharon desde la Plaza Venezuela hasta Los Próceres para encontrarse en la Academia Militar con su líder.
Desde hace 11 años Chávez celebra el aniversario de su intentona golpista, de 18 años, lo glorifica y lo justifica como “una violencia necesaria” en la Academia Militar. Ha intentado convertir el 4 de febrero en fiesta nacional pero todavía no ha contado con el consenso necesario.
Ludmila Vinogradoff - Caracas
www.abc.es
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