Ya es raro que un socialista rectifique. Es como encontrar una aguja en un pajar o como ver volar a un elefante. No imposible, pero en principio dificilillo. Pues miren por donde la señora Aído, que parecía responder al patrón zapateril (o sea, ni una mala palabra, ni una buena acción) se ha dado cuenta de sus muchos errores (sería genial que además se diera cuenta de sus pecados) y ha tomado la decisión de retocar ese engendro criminal que es la nueva ley del aborto.
Y eso que dicen que a los curas ya no les hace caso nadie...Que son como espectros, que pertenecen a otros tiempo, que están anticuados...Aunque bueno, también se dice que nadie va a misa los domingos, y los que vamos vemos las iglesias llenas. Tenemos la ligera impresión de que alguna influencia sí tienen los obispos en la sociedad española, y la prueba de ello es que la genial campaña provida puesta en marcha esta semana ha provocado ya las primeras reacciones, y nada menos que en el ejecutivo socialista de ZP.
Dice doña Bibiana que quizá habría que rectificar eso de que las niñas de 16 años puedan abortar libremente, como quien se saca una espinilla, sin decírselo a sus madres. Y, de paso, prohibir el aborto eugenésico que, entre otras cosas, va contra lo dispuesto por Naciones Unidas en un documento que firmó España. ¿Se han fijado que ya casi no hay personas con Síndrome de Down? Claro, los progres de esta izquierda republicana y guerracivilista no les dejan nacer. Al final va a ser cierto que los nazis eran ante todo unos grandes socialistas.
Pero, como decimos, nunca es tarde si la dicha es buena, y en este caso parece providencial que la titular de igual-da haya escuchado el clamor social, y se reúna en las próximas semanas con distintos colectivos, entre ellos, según parece, también de víctimas del aborto y de asociaciones provida. Ya veremos si realmente quiere saber lo que piensan, o se trata de un paripé como el de la subcomisión del aborto, que no sirvió absolutamente para nada.
Zapatero y sus compañeros de hazañas no se dan cuenta de que han conseguido movilizar a buena parte de la sociedad española, habitualmente perezosa para levantar las posaderas del sillón de orejas para nada que tenga que ver con el Bien Común. Al español, por carácter y por Historia, le importa casi siempre más el cubata de la mesa que los problemas del vecino de arriba. Sin embargo, la soberbia y la ineptitud de este gobierno friki ha hecho que muchos españoles empiecen a comportarse como verdaderos ciudadanos. Y que no decaiga.
Editorial Diario Ya
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